Beneficios de la Reforma Energética, en casa del vecino

Cuartoscuro

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¿Cuándo bajarán los precios del gas, gasolina, combustóleo y energía eléctrica? [… y varios otros cuestionamientos]

Agradezco las preguntas que me ha enviado el cineasta Alfonso Cuarón. Preguntas que muchos mexicanos comparten sobre la #ReformaEnergética […] Sus preguntas enriquecen el debate y ayudarán a conocer con mayor precisión los alcances y beneficios que la Reforma traerá a los mexicanos. […] El @gobrep responderá puntualmente a todas ellas, una vez que sean presentadas las Leyes Secundarias de la #ReformaEnergética.

(Respuesta de Enrique Peña Nieto, vía Twitter, al cineasta Alfonso Cuarón. 28-abril-2014)

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  • 30-abril-2014: Peña Nieto envió al Congreso las iniciativas de la Reforma Energética.
  • 11-agosto-2014: se publican las leyes secundarias de la Reforma Energética.
  • 3-diciembre-2015: Pemex baja precio de gasolina Premium más del 50% … en EEUU.

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El viernes 4 de diciembre los indicadores económicos, vertidos por fuentes oficiales, arrojaban sus datos rutinarios. Entre otros, el dólar en ventanilla se vendía a $17.02 MN y el Euro a $18.23. En gasolinas, la Magna a $13.57 y la Premium a $14.38; mientras que el diesel se cotizaba a $14.20. Y la mezcla mexicana de petróleo, y el Brent, y el Índice IPC, y los CETES 28 días, y… ¡uff!

Cifras y cifras. Sin embargo, sea el rubro que sea, por lo general los mexicanos prestamos poca atención a las fluctuaciones de esos números; porque damos por hecho que, para los ciudadanos de a pie, todo está más caro siempre; y los pesitos en los bolsillos cada vez alcanzan para menos. Y ni hablar sobre nuestra “capacidad de ahorro”… ¿qué es eso?

En conversaciones cotidianas, es recurrente coincidir con compañeros, amigos y familiares, en que la situación del país es muy preocupante. Que, como dice el clásico, este gobierno nos está llevando al despeñadero. Aunque lo cierto es que no descubrimos algo nuevo; la nación no ha estado bien desde hace muchos años, empeoró con el desgobierno de Carlos Salinas, y con Enrique Peña Nieto la tendencia no es promisoria: vamos mal en casi todo y, penosamente, llegando al despeñadero.

Habrá voces oficiales y oficiosas (las segundas, a veces más duras que las primeras) que argumentarán que los críticos solamente ven las pocas, “poquísimas”, asignaturas donde no ha habido algún avance y que, por el contrario, ocultan los muchos logros. Como prueba de ello, podrían presumir la proeza reciente: desde el jueves 3, Petróleos Mexicanos (Pemex) inauguró sus primeros expendios de gasolina en Estados Unidos; concretamente, en Houston. Ese hecho, continuaría el discurso triunfalista, por sí solo indica el buen rumbo y la ambiciosa propuesta mexicana de competir en el mayor mercado del mundo en venta del combustible. La noticia es que se trata de una avanzada en la que se inaugurarán cinco estaciones de servicio en esa ciudad texana. Según se recoge en medios, esa urbe fue seleccionada por la gran cantidad de personas de origen latino, particularmente mexicanos, y por ser un sitio de alta competencia en el negocio de la gasolina.

Con tal suceso, parece que la administración federal calla bocas. Insinúa que deberíamos reconsiderar posturas negativas y replantear percepciones equívocas. Que al contrario, es momento de echar las campanas al vuelo y aceptar que el barco va bien, con un capitán de calidad de exportación.

Pero NO es así. Y no lo es por varias razones:

  1. La gasolina que se venderá en las estaciones de Houston proviene del mercado mayorista estadounidense; es decir, NO será producida en México. Y cómo podría ser de otra forma si la mayoría del combustible que se utiliza en México NO es mexicano: se revela en medios que el 52% de la gasolina y el 75% del diesel que se consumen provienen del exterior. ¿Argumento? Afuera son menos caros. Pemex afirma que importa más gasolina que antes, “pero a menores precios”, lo que le permite ahorrar millones de dólares. No obstante, está clarísimo que ese supuesto ahorro “no se ve reflejado en el precio de venta al público” (El Universal, 4 de noviembre de 2015). Sin duda, al sur del Bravo se sigue pagando un combustible muy, pero muy caro.
  2. Las estaciones de servicio en Estados Unidos no serán propiedad de Pemex. Se trata de estaciones de la franquicia Pemex con inversión de terceros. Por lo tanto, son los propietarios de éstas quienes determinan los precios de venta al público de los combustibles, de acuerdo con las condiciones de mercado. Por caso, la primerísima estación en Houston es propiedad de un inversionista paquistaní.
  3. Vale preguntar a quién se le ocurriría sacar silbatos y serpentinas (por muy navideños que andemos) con la noticia del milagro pemexiano en Texas, cuando la misma viene acompañada de un gran recuerdo de 10 de mayo para los mexicanos de este lado, pues resulta que el precio de la gasolina allá es de menos de la mitad de lo que cuesta en México. Con las consabidas variaciones en el tipo de cambio, el periódico Sin Embargo consignó el hecho de esta manera: “Para llenar un tanque promedio, de 45 litros, con gasolina Premium en el país se necesitarían alrededor de 647 pesos, mientras que en Texas casi 320 pesos”. La calculadora nos dice que, acá, el litro del combustible cuesta $14.38 MN, pero allá se vende a $7.11 MN. ¡Caracoles, la Reforma Energética sí que está trayendo beneficios!, al menos al vecino del norte. De cualquier forma, ¡Felicidades a nuestros hermanos que viven en Houston!

Ojalá algún día presumamos de un gobierno que sepa cumplir sus obligaciones para con quienes vivimos en este país. Pero no perdamos la esperanza; tal vez el 28 de este último mes del año sea ese maravilloso día… ¿alguien apuesta?

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Fecha de publicación en otros medios: 6 de diciembre 2015

Ver: Plumas Libres, Infolliteras

Twitter@RicSantes

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